¿Cómo sobrevivir a la vuelta a la rutina?

Vaya, ya ha empezado octubre y el verano está oficialmente cerrado. Volvemos a la rutina invernal, con los días mas cortos y el “fresquito” al atardecer. Ya mismo las calles olerán a castañas y guardaremos los bañadores en los cajones más inaccesibles. Todo esto que te contamos suena un poco pesado, por eso vamos a darte algunas ideas para no morir en el intento de volver a nuestros hábitos.

1. No olvides dedicarte tiempo.

Estamos tan inmersos en el trabajo y los estudios que el reloj parece que se haya convertido en nuestro enemigo. Vamos corriendo a todos lados y la frase “no tengo tiempo” vuelve a estar presente en nuestros días. En medio a todo este casos intenta parar y dedicarte tiempo. Apaga todo lo que te rodea y solamente escúchate. A veces nos olvidamos y dejamos pasar cosas que nuestro subconsciente quiere decirnos y no podemos obviarlo.

 

 

2. El frío también trae alegría.

Todos teníamos olvidado nuestro deporte favorito, con el calor lo sustituimos por la playa o la piscina, pero
ahora que el sudar no nos va a molestar tanto, vuelve a mover tu cuerpo. Sacúdele el polvo a la mochila del gimnasio y a la esterilla de yoga. Saca tus zapatillas a correr que no hace falta la operación bikini para cuidarnos.

 

 

3. Descubre cosas nuevas.

Nunca es tarde para comenzar un nuevo hobby, y también es una gran manera de cuidarte. Apúntate a esas clases de baile que tanto querías aprender o a ese curso de fotografía que te persigue por las redes sociales. Saca tu lado artístico para así desconectar de las prisas diarias.

4. No dejes los buenos hábitos.

El verano nos enseña a disfrutar del tiempo, de cenar con tranquilidad, de desayunar con lentitud y apreciar los atardeceres en la playa. Bueno pues aunque eso ya queda atrás,

esperamos que hayas adaptado eso a tu rutina invernal. Es otra forma de dedicarte tiempo, disfrutando de cada minuto de todas las cosas que hacemos.

5. ¡Por fin mis bufandas!

Alégrate de ver tu armario de invierno. No nos digas que no habías echado de menos tus abrigos y tu pijama de pelitos. ¡Porque nosotros también!

¡Lo bueno de esto es que volvemos a vernos por los pasillos de nuestras academias!